CIUDAD DE MÉXICO.- Sergio Pérez, “Checo” tuvo, en México, «el fin de semana más decepcionante de la temporada». Acabó último después de una clasificación en la que no pudo pasar de Q1 y una carrera cargada de complicaciones.
Ahora, intenta ya centrarse en el Gran Premio de Brasil, el último de este triplete. Pero deja claro que deben dar un paso adelante: «Necesitamos más de mi coche para empezar a competir más».
La temporada de ‘Checo’ Pérez se está complicando por momentos.
El mexicano no ha sido capaz de extraer todo el potencial de un RB20 que ya de por sí ha tenido una caída de rendimiento a lo largo del año.
A pesar de que Max Verstappen sí ha podido encontrar ese ‘algo’ en su coche que le permite seguir en la lucha por el podio, lo cierto es que el mexicano no da con la clave, ni en términos de ritmo, ni tampoco de rendimiento.
La ‘guinda’ del pastel fue ese último puesto en México –terminó 17º, sólo por delante de Tsunoda, Albon y Alonso, que tuvieron que abandonar antes de tiempo–. Un fin de semana que para él debía ser especial, porque corría en su casa, terminó tornándose en pesadilla. Cayó en Q1 en clasificación y se colocó mal en la parrilla de salida el domingo, lo que implicó una sanción de cinco segundos a pesar de su buen arranque.
Además, tuvo una batalla en pista con Liam Lawson que dañó su coche y que le hizo perder varios puntos de aerodinámica… que evidentemente lastraron el resto de la cita.
El resultado en el Autódromo puede haber sido la gota que colmó el vaso. A los continuos mensajes de Helmut Marko sobre una posible marcha anticipada de Pérez –a pesar de tener contrato firmado para el próximo año– se ha unido la contundencia de Christian Horner.
El jefe de equipo ha dejado claro que a veces hay que tomar decisiones difíciles cuando no llegan los puntos. Más ahora, que ya han perdido la segunda plaza de Constructores con un Ferrari en estado de gracia. ¿Será este GP de Brasil, entonces, el último para Pérez con los de Milton Keynes?
La respuesta sigue siendo una incógnita, pero lo cierto es que el mexicano quiere afrontar la cita de Interlagos con ganas de cambiar de rumbo.
«México fue el fin de semana más decepcionante de mi temporada. Quería tener un fin de semana especial y, como equipo, no nos fuimos con lo que merecíamos. Necesitamos más de mi coche para empezar a competir más, y ese tiene que ser el objetivo antes de Brasil», ha reflexionado en el previo del equipo.
«Desafortunadamente, sufrimos muchos daños en México, así que, una vez más, dependerá de mi equipo poner el coche en las mejores condiciones posibles para el próximo fin de semana, en un marco de tiempo muy corto», ha añadido en referencia al toque con Lawson.
El piloto de Guadalajara tiene claro que, a pesar del ‘desastre’ que vivió en el Autódromo, podrían haber entrado en puntos. Así que espera poder resarcirse este fin de semana.
«El Sprint nos da la oportunidad de sumar puntos extra y eso es lo que buscaremos hacer. Estaba en posición de terminar en los puntos en México, y si logramos un fin de semana más completo, estoy seguro de que podemos salir de Brasil en una mejor posición», ha completado en su explicación.
El de México fue un Gran Premio de todo menos sencillo para Red Bull en términos generales. Max Verstappen también sufrió en pista, a pesar de marcar el mejor tiempo en la clasificación. Dos acciones con Lando Norris provocaron sendas sanciones para el neerlandés, que afrontó una penalización de 20 segundos que finalmente sólo le permitió ser sexto. Perdió, en total, diez puntos con el británico, su principal rival en la lucha por el mundial.
«México fue una carrera para olvidar, pero sabemos que podemos hacerlo mejor y estamos trabajando duro para averiguar qué salió mal y así mejorar nuestra forma para las últimas carreras. Tenemos que hacer todo lo posible para ser más competitivos y volver con más fuerza, a donde sabemos que podemos estar», ha sido contundente.
«Brasil es la última carrera de un largo triplete para nosotros, y obviamente es otro fin de semana con Sprint, así que será muy ocupado, pero también una oportunidad para sumar puntos», ha asegurado, cargado de esperanza.
Parece que la cita en São Paulo es del agrado del líder del campeonato. Así que quiere intentar volver a ganar, algo que no consigue desde junio –en el GP de España–, con excepción del Sprint en COTA.
«Interlagos es una pista muy divertida de manejar, con mucha historia, y también es bastante técnica, con todos los cambios de elevación. Tengo muchas ganas de volver a Brasil y correr frente a los apasionados aficionados», ha sentenciado.