NUEVO LEÓN.- Marcela Villarreal publicó un video en Instagram en el que denuncia a su expareja Eduardo Gaona, diputado y coordinador de Movimiento Ciudadano (MC) en Nuevo León, por violencia de género. En la publicación comenta que ya inició un proceso penal en contra del legislador.

En su denuncia, Marcela comenta que conoció a Eduardo cuando ella tenía 20 años. Trabajaba en la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Nuevo León y él, de 33 años, era su jefe directo. El ahora diputado se aprovechó de su posición de poder para conquistarla y al poco tiempo comenzaron a salir.

Marcela comenta que admiraba a Eduardo por su inteligencia y por el buen trato que tenía con ella; rápidamente se enamoró de él.

Su relación terminó después de unos meses porque Eduardo consiguió otro trabajo. Él desapareció de su vida, sin decirle adiós, lo cual le causó depresión a Marcela y tuvo que acudir a terapia para sanar.

Pasaron 4 años desde el fin de su noviazgo y él la volvió a buscar para que regresaran. Ella aceptó porque seguía enamorada. Fue en esta segunda etapa cuando comenzaron las agresiones.

El primer golpe que recibió Marcela fue una cachetada durante una discusión. A partir de este punto la violencia escaló y las cachetadas pasaron a golpes con el puño cerrado, jalones de cabello, y empujones que la tiraban al piso para después patearla.

“Con el tiempo la violencia física fue más y más frecuente hasta que llegó el día en el que hubo agresión sexual después de una agresión física”.

Los golpes de su expareja la llevaron al hospital en varias ocasiones
Frecuentemente, estos golpes le provocaron lesiones y Eduardo la llevaba al hospital. Él le pedía que le explicara a los doctores que se había lesionado en un accidente o que se había peleado con alguien más. Ella aceptaba y mentía por él.

“Es que me duele mucho, todo lo que pasé y tuve que mentir por él, todo lo que me hundió”.

El círculo de violencia continuaba porque después de cada agresión, Eduardo le pedía perdón a Marcela, le prometía que nunca más lo volvería hacer y cambiaba su actitud con ella, tratándola mejor, haciéndole creer que esta vez sí hablaba en serio.

Marcela admite que se atrevió a compartir su relato porque quiere que le sirva de ejemplo a otras mujeres que están pasando por una situación similar, o para que salgan de una relación violenta cuando aparezcan las primeras señales.

Otro motivo es porque teme que su denuncia penal se quede estancada por los contactos que tiene Eduardo, quien es diputado por MC. Ella espera que el proceso continúe a su favor y le quiten el fuero a su expareja.

Para darle veracidad a su testimonio, la denunciante asegura tener fotografías de los golpes que recibió en su cuerpo, además de los registros médicos de las veces que la mandó al hospital.

Después de la denuncia por violencia de género, Eduardo Gaona publicó un escrito en redes sociales en el que niega las acusaciones en su contra. El diputado asegura que tiene la “conciencia en paz” y no tiene “absolutamente nada que esconder”.

El legislador de MC menciona que ha recibido amenazas y llamadas de extorsión. En su publicación añade que “los personajes de la política que están detrás de esto son capaces de cualquier cosa”.

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